La adicción es mucho más que la dependencia a una sustancia

 La adicción es un patrón de conducta  adquirido en el proceso de una enfermedad mental, que pasa desapercibida en las primeras fases de su desarrollo.

Y este patrón de conducta, lejos de lo que podríamos pensar, responde a un falso mecanismo de supervivencia. Muchas personas piensan que repiten el consumo excesivo de sustancias, a pesar de sus consecuencias negativas, porque tienen una conducta autodestructiva cuando en realidad lo hacen para sobrevivir.

Los síntomas de la adicción a las drogas

¿Y qué no haríamos por sobrevivir?

Cuando nuestra supervivencia está en juego, nuestro cerebro responde en piloto automático para mantenernos anclados a la vida, aunque nuestra vida sea miserable y dolorosa. Estamos hablando de ese mecanismo que haría que pudiéramos comernos un gusano antes que morir por inanición.

El adicto no es capaz de reconocer su enfermedad hasta que no toca fondo.

Pareja haciéndose fotos

En las  primeras fases de la enfermedad  este patrón se desarrolla bajo parámetros de normalidad, y es al cabo del tiempo donde esta conducta se vuelve disfuncional, y la adicción empieza a ser evidente.

Al principio, el consumo pasa desapercibido ya que se enmarca en situaciones sociales y aceptadas. Pero cuando la dependencia ya está instaurada, la persona necesita consumir más y con mayor frecuencia, ya que empiezan a sentir un malestar emocional o físico que desaparece con la ingesta. Es por ello que el adicto empieza a justificar consumos fuera de lo socialmente aceptado, amparándose en su malestar.

En Instituto Hipócrates estamos especializados en el tratamiento de la adicción

Se puede referir a ansiedad o angustia, irritabilidad, apatía, tristeza, soledad, aburrimiento, falta de motivación o un profundo sentimiento de vacío, y todo ello puede estar vinculado a historias personales reales. Pero al final, todas estas emociones  se mantienen durante más tiempo del esperado  , sin que la persona llegue a superar las circunstancias adversas de su vida. Esta dificultad para superar las crisis y mantener el malestar son la evidencia de que hay una dependencia, pero la persona que sufre una adicción aun no lo sabe, y su entorno, aunque testigo del declive personal, sostiene la enfermedad con la esperanza de que algún día el familiar o amigo se reponga o entre en razón, y todo cambie.

Si necesitas información sobre nuestro tratamiento de las adicciones, puedes llamarnos al

La adicción es por tanto una enfermedad que se desarrolla progresiva y lentamente.

Pareja abrazada mirando el horizonte

El  patrón de conducta adictiva  es un conjunto de acciones, pensamientos y emociones, que se dan en una situación determinada y que suelen conllevar al consumo abusivo de una sustancia psicoactiva.

En el proceso de desarrollo de la enfermedad, hay etapas de control donde es posible la abstinencia o el consumo moderado, lo que confunde al propio paciente y a su entorno. Y cuando al final el consumo descontrolado vuelve, se produce una interpretación errónea, ya que el propio sujeto pensará (y así lo comunicará a su entorno), que bebe o consume o realiza una conducta de forma compulsiva por una razón justificada. En realidad, es su patrón adictivo instaurado en una necesidad primitiva de supervivencia, la causa de la realidad desafortunada que está viviendo.

La mayoría de las veces, el adicto hace un recorrido por diferentes instancias sanitarias que solo le llevan a mantener la negación del verdadero origen del problema. En ocasiones el problema está enmascarado por un trastorno de ansiedad, depresión, insomnio o síntomas de TDAH. Es entonces cuando al paciente se le prescriben psicoactivos legales que acaban empeorando el problema al aumentar la tolerancia.

¿Cómo podemos hacer una detección precoz?

Es cierto que ciertas patologías llevan al abuso de sustancias, pero cuando se cruza un malestar emocional sostenido, y un aumento del consumo de alcohol u otras drogas, se debe descartar que no haya una adicción como principal factor de consumo.

Uno de los indicios que nos pueden dar a entender que una persona sufre una adicción, es  el coste de su consumo  . Es decir, cuando sigue consumiendo a pesar de las consecuencias negativas, manteniendo actitudes irresponsables y tomando decisiones poco juiciosas que le complican la existencia, abocándolo a una sensación de fracaso que alimenta la culpa y la baja autoestima.

Hombre en terapia individual

Estas consecuencias negativas pueden llegar antes que la evidencia de un consumo descontrolado. Es por ello, que es necesario saber identificar el patrón de conducta adictiva antes de que el paciente haya tocado fondo.

Por eso, cuando estemos ante una persona que siente que su vida es complicada sin llegar a establecer cambios, que se aferra al drama o al enfado, que siente una sensación de vacío que verbalizará como soledad, aburrimiento, apatía o falta de sentido, que se muestra irritable, se enfada con frecuencia o padece ansiedad, y que se refugia en el consumo de sustancias o conductas abusivas (trabajo, deportes extremos, sexo, juego,  compras, pantallas, etc. ) pensemos que  detrás puede haber un patrón de conducta adictiva  .

Hombre con una tarjeta de crédito y un ordenador

¿Cómo podemos ayudarte en Instituto Hipócrates?

Terraza con vistas al parque natural del Montseny Instituto Hipócrates

 Instituto Hipócrates  es una clínica para el tratamiento de las adicciones con más de 20 años de experiencia. Cuenta con clínica de ingreso y una amplia red de centros ambulatorios propios en las principales ciudades de España, de esta manera, la persona que padece una adicción, está acompañada por Instituto Hipócrates durante todo su proceso, reforzando así el éxito de su recuperación.

El equipo médico, psicológico y terapéutico de Instituto Hipócrates, está especializado en el tratamiento de la adicción al alcohol, al cannabis, a la cocaína, a los fármacos y al juego.

Si necesitas información sobre nuestro tratamiento de las adicciones, puedes llamarnos al

Marta de la Cruz terapeuta Instituto Hipócrates Mallorca

Artículo escrito por Marta de la Cruz (Responsable de Instituto Hipócrates Mallorca, de Instituto Hipócrates Ibiza y Instituto Hipócrates Menorca) para la revista Salut i Força.

Este blog tiene fines informativos y no debe sustituir el consejo médico. Entendemos que la situación de cada persona es única y este contenido solo proporciona una comprensión general de los trastornos por uso de sustancias.